de Ives
Veinte hermanos se reunieron del 1º de julio por la tarde en Ben Smen, casa dirigida por los jesuitas en la periferia de Argel: 18 hermanos de Jesús de la región, más un hermano del Evangelio de Béni Abbés y Roger llegado del Líbano y representante de la región de Cercano Oriente. En el programa: el nuevo equipo regional y la preparación del capítulo 2014. Programa cargado pues. Horario algo apretado según algunos. Esto no ha impedido invitar a varias personas: dos obispos, un ermitaño y un historiador. Sin olvidar a las Hermanitas de Jesús que vinieron a compartir una comida.
Empezamos por el compartir de vida. Como en cada encuentro un hermano del evangelio de Béni-Abbès se unió a nosotros. Roger nos aportaba la mirada de Oriente y nos hacía tener más cercano lo que se vive no solamente en el Líbano su país, pero también en Siria que tanto sufre y en Egipto que se encuentra en periodo de búsqueda.
Esta mirada de fuera también era la del arzobispo de Argel Mons. Bader, originario de Jordania. Vino a intercambiar con nosotros el 4 de julio, a propósito de las fraternidades, él nos dice: “Lo que yo espero de los hermanos es simplemente una presencia”. La víspera Mons. Henri Teisser antiguo obispo de Argel se reunió con nosotros también para compartir no solamente la palabra sino también el pan eucarístico y la mesa de la tarde. Riqueza y limitaciones de la Iglesia y de su personal.
También tuvimos la aportación muy fraterna de un ermitaño benedictino que vive en Argelia desde 1964 y se encuentra muy cerca de Tibhirine. Él compartió con los monjes los años difíciles, pero no se encontraba con ellos la noche del 27 de marzo de 1996, noche del secuestro. Él nos narró de manera muy fraterna lo que supuso para él esos años negros. Algunas frases elegidas al azar de lo que nos dijo: “La abeja hace miel donde vive, el monje dondequiera que vaya hace la obra de Dios… Aquél que se convierte en ermitaño deberá vivir sin apoyo. La soledad es una prueba temible en la cual existe el apoyo del otro… La vida del ermitaño no está separada del servicio de los otros” .
Una tarde también pudimos escuchar a un historiador oranés, profesor en Argel; hablarnos de la situación actual en Argelia. El es tanto sociólogo como historiador y nos habló a la vez de sus inquietudes y sus esperanzas, a pesar de todo, incluso si el pesimismo parece tomar la delantera. Es un hombre que ama su país.
También hacía falta un nuevo equipo regional. Era bueno encontrar a un regional más joven y finalmente Ventura fue elegido.
Pudimos hablar ampliamente sobre la preparación del Capítulo de 2014. Tras haber dicho lo que esperábamos del prior y del equipo de la Fraternidad general, nos expresamos sobre la federación con vista a los hermanitos del Evangelio. No os sorprenderéis saber que la persona de Jesús fue finalmente el centro de nuestros intercambios. Jesús de Nazaret, Jesús el Nazareno, sí, pero Jesús por las rutas de Palestina, Jesús muerto y resucitado y que se entrega como alimento, y cuyo Evangelio debe ser meditado y rumiado continuamente. Así pues ¿qué palabra podemos decir nosotros en tanto que Hermanitos de Jesús?
Otro tema nos interesaba mucho. Vivimos en el centro del mundo musulmán, ahí es donde nació la Fraternidad. Incluso si tenemos que dejar El Abiodh, este lugar del nacimiento sigue siendo la marca, el sello de vida de la Fraternidad. Varios de nosotros piensan que este lugar con sus orígenes no debe perderse, y que algo tenemos que decir, comunitariamente, sobre este mundo. Pero todo esto habrá que hablarlo en el encuentro de zona que tendrá lugar en Camerún donde se reunirán los delegados de Argelia, Cercano Oriente, junto con los hermanos africanos.